Me siento perdido, siento que mi vida se va, intento luchar por ella, intento levantarme y poner todo lo que tengo dentro de mí, pero no sé por qué no llegó ni comprendo por qué estoy en esta vida que me ha tocado vivir.
Sé que te he perdido, que ya no estas aquí , sé que nunca te voy a poder acariciar esas arrugas que tenías en la cara, sé que nunca voy a poder sentir cómo se cierra la puerta cuando la melodía está sonando dentro de un cuarto lleno de desorden, debido al miedo de que llegara ese momento que por desgracia llegó, ese momento que yo sabía que iba a llegar por destino de Dios. No quería verlo, no quería sentirlo, pero llegó, te fuiste y te perdí, pues sí, te perdí, lo único que pienso ahora mismo es qué voy hacer cuando llegue una nueva vida , dónde estará esa palabra que es abuelo, dónde estará esa sonrisa que me ha dado toda mi vida cuando tú estabas, esos consejos tan sabios que siempre me ha costado comprender.
No es porque yo sea un egoísta pero sí que te puedo decir que yo no tuve un abuelo, yo no tengo una familia numerosa, no sé que es tener primos, ni primas, y ahora parece ser que se repite la historia. Ahora mismo en este mundo incomprendido, no sé que le puedo decir a una nueva vida que puede llegar, cómo puedo calmar ese dolor de no saber cómo se hace eso de no poder escuchar la palabra abuelo.
Pero sí que quiero darte las gracias por la madre que tengo, por el amor que forjaste en nuestra familia, muchas veces más severo, pero sí que dejaste ese amor reflejado en tu familia, que estamos aquí para llorar tu pérdida, esa pérdida de un padre que siempre nos ha dado todo lo posible y lo mas bonito que el amor, el amor de un padre que siempre ha querido que nos amáramos y que diéramos todo lo mejor de nosotros hacia las personas que nos quieren.
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